Falta de información y orientación profesional seria, didáctica y oportuna.
Metas poco realistas, pretender solucionar un problema que ha evolucionado durante años en unas pocas semana o meses.
Planificación alimentaria muy generalizada : dietas generalizadas sin planificación de horarios , tipos de alimentos(marcas), cantidades precisas, formas de preparación, cantidades
Falta de flexibilidad en la planificación alimentaria: incluir alternativas realistas que se ajusten a los gustos individuales de cada individuo.
Falta de supervisión y orientación constante, diaria, semanal.
Subestimar la importancia de la actividad física
Incorporar hábitos alimentarios realistas, participación en reuniones sociales, ingesta de alcohol, confites, comida rápida y su correcto uso y moderación.
Aplicación de plan dietario en contexto familiar y/o social.
Mala administración de recursos económicos: aprender a escoger los alimentos en base a su real valor nutricional.
Falta de apoyo y orientación profesional permanente.